Ciudad de México a 7 de julio de 2025.– CIAL Dun & Bradstreet, el centro de información para América Latina, que provee datos e información clave a compañías de todos los sectores económicos para la toma de decisiones estratégicas y exitosas sobre su negocio, presentó su más reciente reporte económico CIAL Insights.
El entorno económico nacional continúa mostrando señales de desaceleración en diversos frentes. En mayo, el crédito bancario total alcanzó los 7.73 billones de pesos, con un crecimiento real anual de 6.3%, una cifra menor al 9.2% observado en enero. Destaca la contracción del crédito agropecuario, que registró una caída de 8.1% real anual, su peor nivel desde mediados de 2021. Si bien la cartera vencida total se mantiene en niveles bajos (1.97%), algunos sectores específicos, como el de insumos textiles y la industria del cuero, presentan índices de morosidad superiores al 10%.

En cuanto a la inversión fija bruta, los resultados de abril reflejan una contracción anual de 7.7%, la mayor desde enero de 2021. Este retroceso responde tanto a la caída de 9.1% en la inversión en maquinaria y equipo como al desplome de más de 20% en la construcción pública, que acumula ya ocho meses consecutivos en terreno negativo.
El mercado laboral también se ve impactado por este panorama. En junio, el empleo formal prácticamente se estancó, con un crecimiento anual de apenas 0.03%. Durante los últimos 12 meses se generaron solo 6,222 nuevos puestos registrados ante el IMSS, lo que representa una caída de 98.6% frente al mismo periodo del año anterior. En ese mismo mes se perdieron 45,624 empleos, marcando la mayor pérdida para un mes de junio desde las crisis de 2009 y 2020. En paralelo, los salarios reales muestran una desaceleración, con un crecimiento de sólo 2.9% anual en junio.

La debilidad también se extiende al consumo y a los indicadores de ventas. Las ventas internas de vehículos ligeros cayeron 5.9% anual en junio, acumulando tres meses consecutivos a la baja. Por su parte, las remesas familiares disminuyeron 4.6% anual en mayo, afectadas por factores como la incertidumbre migratoria en EE. UU. y el anuncio de un nuevo impuesto, que finalmente se fijó en 1.0%.
Frente a este panorama, las expectativas de crecimiento económico para 2025 se mantienen en niveles bajos. De acuerdo con la más reciente encuesta de Banxico, el sector privado anticipa una expansión de apenas 0.1% para el PIB nacional, mientras que la inflación cerraría el año en 4.1%. En contraste, los mercados financieros han mostrado cierta estabilidad: el peso mexicano se ha apreciado 10.36% en lo que va del año, ubicándose en 18.63 unidades por dólar, y la Bolsa Mexicana de Valores registró un avance semanal de 1.02%.
Fuente: CIAL Insights.