Reino Unido no permitirá la venta de vehículos que usen gasolina a partir del 2030

Reino Unido comunicó que pondrá fin a la venta de automóviles y camionetas nuevas de gasolina y diésel para 2030, así se convertiría en el primer país del G7 en descarbonizar la carretera. La prohibición es parte del plan de revolución industrial verde anunciado por el primer ministro Boris Johnson que incluye una inversión gubernamental de 16 mil millones de dólares, donde el gobierno espera que el sector privado contribuya con más de tres veces esa cantidad.

'Aunque este año ha tomado un camino muy diferente al que esperábamos, el Reino Unido está mirando hacia el futuro y aprovechando la oportunidad para reconstruir de manera más ecológica', afirmó Johnson. “La recuperación de nuestro planeta y de nuestras economías puede y debe ir de la mano”.

Para acelerar las ventas de vehículos más limpios, el gobierno gastará 1.700 millones de dólares en puntos de recarga de vehículos eléctricos y casi 664 millones para desarrollar y producir baterías para autos eléctricos. Unos 773 millones de dólares en subsidios harán que los vehículos de cero emisión y ultrabajas para que sean más baratos para la gente.

'Compartimos la ambición del gobierno por el liderazgo en la descarbonización del transporte por carretera y estamos comprometidos con el viaje', dijo Mike Hawes, director ejecutivo de la Sociedad de Fabricantes y Comerciantes de Automóviles, en un comunicado. 'Los fabricantes han invertido miles de millones para entregar vehículos que ya están ayudando a miles de conductores a cambiar a cero emisiones, pero esta nueva fecha límite plantea un desafío inmenso'.

La nueva fecha límite del Reino Unido se encuentra entre las más agresivas del mundo. Noruega, que tiene una economía mucho más pequeña que Gran Bretaña y una ventaja significativa en la carrera para poner más autos eléctricos en las carreteras, ha dicho que todos los autos de pasajeros y camionetas nuevos vendidos deberían ser vehículos de cero emisiones para 2025.

'El éxito dependerá de asegurar a los consumidores que pueden pagar estas nuevas tecnologías, que satisfarán sus necesidades de movilidad y, fundamentalmente, que pueden recargar tan fácilmente como repostan. Para eso, buscamos que otros intensifiquen y cumplan con nuestro compromiso', aseguró Hawes.