El sector automotriz de China se enfrenta a problemas crónicos como falta de insumos en investigación y tecnologías clave, junto con los impactos a corto plazo generados por los recortes de los subsidios a los vehículos de nueva energía y por normas de emisiones más estrictas para los vehículos tradicionales, explicó Miao.
Sin embargo, señaló que la confianza del mercado ha repuntado, dado que la producción de automóviles registró un crecimiento interanual positivo en noviembre después de la entrada en vigor de políticas para estimular el consumo.
China seguirá impulsando un desarrollo de alta calidad en el sector de la automoción, activando la vitalidad del mercado, alentando a los fabricantes a explorar mercados internacionales y creando condiciones igualitarias para todas las empresas, tanto chinas como extranjeras.
En 2019 se vendieron alrededor de 25,77 millones de vehículos en el que es el mayor mercado automotriz del mundo, una disminución interanual del 8,2 por ciento, según la Asociación de Fabricantes de Automóviles de China.
La caída se amplió frente al 2,8 por ciento de 2018, cuando las tensiones comerciales, el endurecimiento de las normas sobre emisiones y el retiro de los subsidios para vehículos de nueva energía ejercieron conjuntamente una importante presión sobre la industria.
Fuente: Xinhua en español.
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