Cluster Industrial – Retos que enfrentará sector automotriz con nuevo acuerdo México-EU

Plataforma líder en información de la industria de movilidad

Cluster Industrial - Retos que enfrentará sector automotriz con nuevo acuerdo México-EU

Retos que enfrentará sector automotriz con nuevo acuerdo México-EU

Escrito por Cluster Industrial

Nacional 29/08/2018 00:00

Dicho acuerdo propuesto entre Estados Unidos y México permitiría al presidente Donald Trump imponer aranceles de hasta un 25 por ciento a las importaciones de automóviles ligeros, SUVs y autopartes fabricados en México por encima de ciertos volúmenes
Estados Unidos y México llegaron a un acuerdo en la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN o NAFTA, como se le conoce por sus siglas en inglés). Así lo confirmaron los presidentes de ambos países, Donald Trump y Enrique Peña Nieto, tras las intensas negociaciones llevadas a cabo. Durante una llamada telefónica, transmitida desde la Casa Blanca, Trump y su par mexicano explicaron a la prensa que habían llegado a un pacto preliminar. Donald Trump señaló se trataba de un arreglo muy importante para los fabricantes y agricultores de ambos países y expresó su voluntad de cambiarle el nombre al acuerdo. "Solían llamarlo NAFTA. Nosotros lo vamos a llamar Acuerdo Comercial Estados Unidos-México. Nos desharemos del nombre NAFTA", dijo. Pero un acuerdo no notificado anteriormente entre los dos vecinos permitiría a Estados Unidos imponer aranceles por “seguridad nacional” a las importaciones de más de 2.4 millones de vehículos fabricados en México y a las de autopartes mexicanas que superen los 90,000 millones de dólares anuales. De acuerdo con Ildefonso Guajardo, quien lideró el equipo negociador mexicano en el proceso de modernización del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, el acuerdo anterior, aunque trajo una gran transformación, se agotó políticamente debido a que durante 22 años no se le dio mantenimiento. "Esto llevó a que en Estados Unidos creciera la población a la que no le gustaba el acuerdo, hoy, 35% de los habitantes considera que fue un mal acuerdo para su país, quizás porque viven en zonas que antes eran de alto nivel manufacturero y que el cambio tecnológico ocasionó perdida de empleos”. Por ello, consideró que la renegociación hace este acuerdo más resistente al tiempo así como a la inestabilidad económica o política. El encargado de la política comercial indicó que la solución de controversias, que Estados Unidos quería mitigar creando incertidumbre para las inversiones, se logró salvar "Logramos crear un capitulo fuerte para las inversiones más importantes que llegan a México, lo que crea un panorama favorable de negocios. También se logró evitar que un país pueda poner salvaguardas, y poder llevar este tipo de casos a paneles de la Organización Mundial del Comercio”. FOTO ESPECIAL El Gobierno de Trump planea anunciar en las próximas semanas los resultados de una investigación sobre si los autos y las importaciones parciales representan un riesgo para la seguridad nacional. El estudio podría usarse para justificar aranceles del 25 por ciento en Estados Unidos sobre las importaciones de automóviles con el argumento de que proteger la industria automotriz estadounidense es vital para la seguridad nacional bajo una ley comercial que data de la Guerra Fría. A los fabricantes de automóviles les preocupa que el acuerdo indique que Estados Unidos procederá a aplicar las tarifas y es probable que también utilicen los aranceles para obtener concesiones de la Unión Europea y Japón. Fuentes de la industria han dicho que los gravámenes podrían costar cientos de miles de puestos de trabajo y aumentar los precios de los vehículos. Un acuerdo por separado establece un posible escenario en el cual Estados Unidos aumenta sus aranceles normales de “nación más favorecida” en autos, actualmente en 2.5 por ciento. Sin embargo, el encargado del sector privado en la renegociación del TLCAN, Moisés Kalach, encargado del sector privado en la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, dijo a Reuters que no cree probable que Estados Unidos imponga el arancel y que los actuales acuerdos comerciales para el sector están salvaguardados mientras tanto. “Tenemos un plan alternativo si ponen la 232, pero también tenemos la posibilidad de que se excluya a México de la 232” dijo Kalach a Reuters en referencia a la sección que argumenta amenazas a la seguridad nacional para la economía estadounidense. FOTO: Moisés Kalach, encargado del sector privado en la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN). México se reserva el derecho de impugnar el uso estadounidense de aranceles de “seguridad nacional” en la Organización Mundial del Comercio (OMC), dijeron las personas informadas sobre las conversaciones. Debajo del tope de las 2.4 millones de unidades, los vehículos que cumplan con los requisitos de contenido regional nuevos y más estrictos podrían ingresar a Estados Unidos libres de impuestos. Los vehículos dentro del límite que no cumplan con las nuevas y más estrictas reglas de contenido pagarían una tarifa de 2.5 por ciento, dijeron las fuentes, que evitaron identificarse porque los detalles del acuerdo no se han publicado oficialmente. En 2017, casi 1.8 millones de automóviles y vehículos urbanos deportivos (SUVs, por su sigla en inglés) se exportaron a Estados Unidos desde México. Funcionarios estadounidenses dijeron que el acuerdo apunta a atraer más empleos de la industria automotriz a Estados Unidos y México. Los términos del acuerdo no son definitivos y podrían cambiar dependiendo del resultado de las negociaciones entre Estados Unidos y Canadá, y de otros factores. Las exportaciones mexicanas de autopartes libres de impuestos hacia Estados Unidos podrían tener un límite de 90,000 millones de dólares anuales en virtud del acuerdo, dijo Ann Wilson, vicepresidenta de asuntos gubernamentales de la Asociación de fabricantes de motores y equipos. La cifra excede los niveles actuales, pero los envíos de piezas por encima de ese límite podrían estar sujetos al capítulo 232 de aranceles, dijo Wilson. Las camionetas mexicanas que no cumplen con las cuotas de contenido regional ya pagan un arancel del 25 por ciento. No estaba claro si también podrían estar sujetas a límites adicionales ni cómo se contarán o administrarán. El acuerdo establece además límites para que los fabricantes de automóviles usen acero y aluminio local, según las fuentes. Los componentes del vehículo estarían sujetos a límites regionales de contenido en diferentes niveles, dependiendo del tipo de pieza o sistema. Los motores y las transmisiones -los sistemas de mayor valor en un vehículo- tendrían una porción de contenido regional del 75 por ciento, dijeron las fuentes. Una portavoz del Representante de Comercio de Estados Unidos declinó hacer comentarios sobre los detalles no revelados previamente del acuerdo entre Estados Unidos y México. La Secretaría de Economía de México no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios. CAMBIARÍA ESCENARIO PARA OEM´s Y PROVEEDURÍA EN MÉXICO El mecanismo de aranceles en el acuerdo preliminar entre Estados Unidos y México probablemente cambiaría poco para los fabricantes de automóviles de Detroit, como General Motors , que construye grandes camionetas Chevrolet Silverado y GMC Sierra en un complejo en Silao, Guanajuato. Sin embargo, las firmas asiáticas y alemanas, y los fabricantes y proveedores que desean expandir la producción en México, podrían estar en desventaja y verse forzados a obtener más producción tanto de vehículos como de motores en Estados Unidos. “El tema de autos cambia, la regla es más estricta. Esto quiere decir que los nuevos autos que se exporten bajo el nuevo tratado tendrán más contenido regional. Esto hace que sea más difícil para nuestras armadoras y nuestra huella productiva en el país poder exportar. Ahora la regla nueva de origen se calcula que cubría el 70 por ciento de las exportaciones hoy y se tiene que trabajar en una transición del 30 por ciento restante hacia cambiar sus cadenas de suministro para poder cumplir con estas reglas de origen", comentó en una entrevista Moisés Kalach. Mientras esto no suceda, pagarán el 2.5 de arancel pero por ningún otro motivo se limitarán las exportaciones. Se espera que el acuerdo comercial revisado surta efecto en 2020 y se implemente gradualmente durante cinco años, dijeron las personas familiarizadas con la propuesta. Un tope a las exportaciones de vehículos mexicanos a los Estados Unidos empujaría a los fabricantes de automóviles y proveedores a enfrentar una serie de nuevos desafíos. “Efectivamente la aplicación de aranceles a través de seguridad nacional que fue lo que hizo EU en acero y aluminio es algo inaceptable, y es algo violatorio de la Organización Mundial de Comercio. Es algo que no queremos y es algo inaceptable, si esto pasara en autos, México podría volver a ser esa retractación", comentó Kalach. Asegura que "si se imponen aranceles bajo seguridad nacional a autos, se les impondrá a todo el mundo, no se les impondrán solo a México, en cambio si se le imponen aranceles a todo el mundo, México saldrá mejor cuidado ya que seguirá teniendo acceso al mercado americano en base a nuestra nueva negociación". Las reglas alentarán los esfuerzos para certificar las piezas como compatibles con Norteamérica, incluso si incluyen contenido de otros lugares. Eso podría agregar cientos de millones de dólares en costos a los fabricantes de automóviles durante la próxima década, dijeron funcionarios de la industria. El nuevo tope en las exportaciones totales de vehículos podría provocar una prisa para que las empresas anuncien capacidad de producción adicional en México en los próximos meses para tratar de “asegurar” el espacio bajo el tope antes de que el acuerdo entre en vigencia, dijeron funcionarios de la industria automotriz. Las nuevas reglas de contenido y un nuevo requisito de que el 40-45 por ciento de un vehículo sea producido por trabajadores que ganan más de 15 dólares por hora (mucho más de lo que se paga en México), podría llevar a los fabricantes a intentar subir los precios de los vehículos. AUTOS QUE DEBERÁN PAGAR NUEVO ARANCEL El Nissan Versa Sedan, el Audi SQ5 y el Fiat 500 son los únicos autos ensamblados en México que actualmente no pagan arancel y deberán hacerlo con el aumento al 75% del contenido regional. Según cifras de la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras de Estados Unidos (NHTSA, por sus cifras en ingles), entre todos los vehículos ensamblados en México, sólo hay tres que actualmente no pagan arancel y tendrían que hacerlo con el nuevo acuerdo, porque están por encima del 62.5% de las reglas actuales, pero por debajo del 75% del nuevo tratado. Se trata del Nissan Versa Sedan, el Audi SQ5 y el Fiat 500. Hoy en día el Nissan Versa que se fabrica en Aguascalientes y Cuernavaca, se destina principalmente al mercado interno. El Audi Q5, ensamblado en Puebla, se exporta a todo el mundo, no sólo a Norteamérica. Y el Fiat 500 está reduciendo su producción en la planta de Toluca en favor del Jeep Compass. Fuente: Cluster Industrial +
Suscríbete Suscríbete al boletín